
Desarrollo
Siendo este un producto poco tradicional, se hace necesario enseñarle al consumidor un uso adecuado para sacarle el mayor provecho.
Para ello, se hace una alianza estratégica con el Centro Culinario Amura, que es la mejor escuela de cocina en Costa Rica, donde sus chefs probaron el producto y desarrollaron recetas específicas con cada una de las presentaciones.
Mediante un código QR en las etiquetas, el consumidor ingresa a un landing page cooperativo entre las dos marcas, donde podrán encontrar los ingredientes y preparación de esas recetas “signature” de los chefs.
Además, los envases cuentan con una colilla con usos sugeridos del producto.